La agricultura ecológica en el valle del Guadalhorce
Una serie de factores que confluyen en el Valle del Guadalhorce le hace ser especialmente indicado para el desarrollo de la agricultura ecológica.
A continuación enumeramos algunos de ellos:
1) Agricultura extensiva. En la comarca predomina una agricultura poco intensiva conservándose zonas cultivadas mediante métodos tradicionales muy próximos a la agricultura ecológica. Este tipo de agricultura tiene lugar sobre todo en huertas situadas en comunidades de regantes históricas. Varios motivos han permitido la conservación de este modelo de agricultura:
El tamaño medio de la explotación agrícola en la comarca es pequeño predominando un tipo de distribución de la tierra minifundista denominada huerta. En estas huertas se practican técnicas de manejo tradicionales con aplicación de pocos insumos.
En la comarca predomina una agricultura a tiempo parcial factor que hace que se acentúe el carácter extensivo de estas huertas.
2) Biodiversidad de cultivos. La biodiversidad es una de los pilares de la agricultura ecológica. El Valle del Guadalhorce es una zona muy heterogénea, donde en una superficie relativamente pequeña encontramos una gran diversidad topográfica, edafológica y climática que junto con otros factores de tipo social y cultural posibilita que en la comarca se cultiven una amplia variedad de especies. Si a todo ello le añadimos un manejo agrícola poco intensificado, el resultado es que en una superficie pequeña como las huertas del Guadalhorce existan una gran diversidad de cultivos. En cuanto a frutales es muy común el policultivo de especies leñosas en fincas con cítricos entremezclados con otros frutales. En cuanto a hortaliza es muy frecuente la huerta familiar con gran diversidad de especies cultivadas durante todo el año. Estas huertas son auténticos museos vivos al aire libre en los que se siguen cultivando variedades autóctonas y otras variedades antiguas que han dejado de cultivarse en otras zonas.
3) Tipos de cultivos. Los cultivos más abundantes de la comarca (cítricos y olivar) son cultivos cuya conversión a la agricultura ecológica es relativamente fácil. Además los malos precios de estos cultivos animan a muchos agricultores a buscar soluciones y alternativas para diferenciar sus producciones y hacerlas más rentables.
3) Proximidad zonas de consumo. Málaga es la provincia de Andalucía donde existe una mayor demanda de productos ecológicos. Esta demanda se ve concentrada principalmente en la costa del Sol y la ciudad de Málaga zonas muy próximas al Valle del Guadalhorce. La relación consumidor productor se
Todas estos factores han condicionado que en la comarca del Valle del Guadalhorce existan en la actualidad (año 2011) unas 1500 ha de cultivos ecológicos certificados y muchas más en proceso de certificación.
Sabedor de los problemas y potencialidades de la agricultura de la comarca el GDR Valle del Guadalhorce viene trabajando desde el año 1996 en distintas líneas para desarrollar la agricultura ecológica.
Uno de los problemas que detectamos en los/as agricultores/as que decidieron convertir sus sistemas productivos en ecológicos, es que no encontraban un servicio de asesoramiento especializado en sistemas productivos ecológicos. Con lo cual su conversión se basa en autoformación y pruebas de ensayo y error lo que ha llevado a muchos/as agricultores/as a abandonar este tipo de sistemas de producción. Por ello, para favorecer el cambio en la metodología de trabajo y pasar de un sistema de cultivo convencional a un sistema de producción ecológico apostamos fuertemente en la formación y asesoramiento directo a los agricultores en sus propias explotaciones.
Respecto a la comercialización, actualmente desde el G.D.R. Valle del Guadalhorce en colaboración con la asociación Guadalhorce Ecológico viene trabajando en el fomento del consumo de alimentos ecológicos y en la potenciación de los circuitos cortos de comercialización a través principalmente de la Red de Mercadillos Ecológicos del Valle del Guadalhorce, en la cual participan hoy en día 4 de los 7 pueblos de la comarca (Cártama, Pizarra, Alhaurín el Grande y Coín)
Mediante la eliminación de intermediarios conseguimos dos objetivos básicos:
1. El consumidor puede adquirir productos ecológicos a unos precios más competitivos.
2. El propio productor adquiere mayor valor añadido por su producción.
